Un desayuno especial

Al ver esta fotografía seguro que ya han averiguado de que se trata, en esta entrada vamos ha hablar de la maravillosa película dirigida por Blake Edwards, Desayuno con diamantes. Protagonizada por Audrey Hepburn y George Peppard.

"Era un cálido día, casi de verano, y ella llevaba un fino y fresco vestido negro, sandalias negas y un colllar de perlas. Pese a la elegancia de su delgadez, casi tenía un aire de salud propio de los que desayunan cereales, una limpieza de jabón y limón, y una pincelada rosa subido en las mejillas. Tenía la boca grande y la nariz respingona.Unas gafas de sol le ocultaban los ojos. Era un restro más allá de la infancia, y sin embargo pertenecía a una mujer.Pensé que podía tener cualquier edad entre los dieciséis y los treita años, y resultó que le faltaban dos mese para cumplir diecinueve"
                                                                                             TRUMAN CAPOTE,Desayuno con diamantes

Decimos que "los diamantes son para siempre", ¡y es verdad! les diamants sont eternels. Y ¿por qué no?, Desayuno con diamantes, también. Evocar esta película, volver a verla, descubrir de nuevo a la maravillosa Audrey Hepbourn, su rostro, su aire, produce siempre el mismo placer, tiene el mismo glamour. Esa chispa de disfrute que brilla sin apagarse nunca.

El vestido:

Capote sugirió una razón de por qué el negro le sentaría bien a Holly cuando escribió en la novelasobre el intenso gusto de su heroína por los colores lisos que "la hacían resplandecer de ese modo". Otra razón sería el aspecto eminentemente práctico del vestidito negro. Todas las chicas alegres de la época de Holly, con muchos compromisos y poco dinero, conocían el valor de un traje negro: combinaba con todo tipo de accesorios y no había que limpiarlo con demasiada frecuencia. Sin embargo, también transmite distintos mensajes y tal vez haya algo en ello que refleje la ambigüedad de Holly.


Una de las escenas de estas películas más destacada es:
Paul: Holly, estoy enamorado de ti
Holly: ¿Y qué?
Paul: Cómo que ¿y qué? ¡Qué preguntas haces ! ¡Te quiero y me perteneces!
Holly: No, las personas no pertenecen a nadie
Paul: ¡Claro que sí!
Holly: No dejaré que nadie me ponga en una jaula
Paul: ¡Yo no quiero encerrarte en una jaula! ¡Solo quiero quererte!
Holly: ¡Es lo mismo!
Paul: ¡No, no lo es ! Holly. . .

El abrazo a tres, entre Holly, Paul y el gato en el medio, se ha convertido en uno de los más famoso de los abrazos en la historia del cine.

La canción:
Los días de mucho sol, se lavaba el pelo y, en compañía del gato, un macho rojizo atigrado, se sentaba en la escalera de incendios y rasgaba la guitarra mientras se le secaba el pelo. Cada vez que oía la música, yo me acercaba a la ventana en silencio. Tocaba muy bien, a veces, también cantaba. Cantaba con la voz ronca y quebradiza de una adolescente.
                                                                                     TRUMAN CAPOTE, Desayuno en Tiffany

Sin mucho más que destacar, solo una última cosa que espero que los lectores que hayan visto esta película esta película ES MARAVILLOSA y quién no haya visto esta película : ¿ A qué esperáis ?

XoXo
PAS